Por la tangente, además, menudos son los hijos, ya verás, ya, que los tuyos aún son pequeños pero seguro que ya empiezan a salirse... Abrazos orbitales
Ana, llega un momento en el que no puedes controlar los imponderables. Por un lado está bien, les ves crecer y recibir influencias de otros sitios, pero por otro, y de manera egoísta, me gustaría que sólo yo fuera el planetario.
Por la tangente, además, menudos son los hijos, ya verás, ya, que los tuyos aún son pequeños pero seguro que ya empiezan a salirse...
ResponderEliminarAbrazos orbitales
Ana, llega un momento en el que no puedes controlar los imponderables. Por un lado está bien, les ves crecer y recibir influencias de otros sitios, pero por otro, y de manera egoísta, me gustaría que sólo yo fuera el planetario.
EliminarAbrazos de papade