Ya sabemos como son los filósofos, cuando uno ya te había conquistado viene otro y te convence de lo contrario. Hoy, con vuestro permiso, voy a filosofar con Anita y le digo que no, que es la misma piedra disfrazada de otra cosa. La lógica de Miguel me parece irrebatible. Besitos filosóficos.
Creo que esta vez lo he pillado. Todo depende de la velocidad del cambio. Si las piedras son lentas podemos tropezar con las mismas y si los lentos somos nosotros también... o no.
Ana, en principio y por principios nunca se es el mismo ni se es la misma piedra. Las coordenadas espacio-temporales siempre difieren. A eso se refería el filósofo y a eso nos referimos cuando sabemos que los errores son distintos, a pesar de llevar impreso el aroma de la humanidad.
esa piedra no tendrá el mismo entorno, ni será la misma hora, ni tendrá el mismo peso, quizá más verdín, quizá algún guijarro menos, quizá... No, nunca cometemos el mismo error, es otro, siempre es otro, similar, pero no el mismo.
Es la tendencia a cometer los mismos errores. Somos olvidadizos por naturaleza y reacios a aprender. Heráclito no conoció nuestros ríos. Creo que regresaría a bañarse...:) Sonrío...
Si está en el río claro, je je.
ResponderEliminarAbrazos.
Todos estamos más que calados, Miguel.
EliminarAbrazotes remojados
Siempre son otras piedras las que se ponen en el camino, aunque se disfrracen de la misma.
ResponderEliminarBesos pétreos
La culpa nunca es de las piedras, es de nuestra atracción hacia ellas.
EliminarBesos de cantera
Es mejor ir bien calzado...
ResponderEliminarBesos.
Y con buena suela, que la gravilla lo agrava todo.
EliminarBesotes fluviales
Ya sabemos como son los filósofos, cuando uno ya te había conquistado viene otro y te convence de lo contrario. Hoy, con vuestro permiso, voy a filosofar con Anita y le digo que no, que es la misma piedra disfrazada de otra cosa. La lógica de Miguel me parece irrebatible. Besitos filosóficos.
ResponderEliminarNo existe la verdad verdadera y absoluta. Eso sí, si partimos de unos parámetros, hay que respetarlos. Y como nada vuelve, pues...
EliminarBesotes refleivos
Creo que esta vez lo he pillado. Todo depende de la velocidad del cambio. Si las piedras son lentas podemos tropezar con las mismas y si los lentos somos nosotros también... o no.
ResponderEliminarUn saludo.
Ana, en principio y por principios nunca se es el mismo ni se es la misma piedra. Las coordenadas espacio-temporales siempre difieren. A eso se refería el filósofo y a eso nos referimos cuando sabemos que los errores son distintos, a pesar de llevar impreso el aroma de la humanidad.
EliminarSaludos de bienhallada
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEl río corre, avanza. Nunca es el mismo. La piedra sí, quizá un poco más erosionada, pero la misma...
ResponderEliminarBesos desde el aire
esa piedra no tendrá el mismo entorno, ni será la misma hora, ni tendrá el mismo peso, quizá más verdín, quizá algún guijarro menos, quizá... No, nunca cometemos el mismo error, es otro, siempre es otro, similar, pero no el mismo.
EliminarBesotes en movimiento
Es la tendencia a cometer los mismos errores. Somos olvidadizos por naturaleza y reacios a aprender. Heráclito no conoció nuestros ríos. Creo que regresaría a bañarse...:) Sonrío...
ResponderEliminarPero no es el mismo error, similar, sí, porque tenemos tendencias y somos muy animales, pero nunca es el mismo.
EliminarBesotes fluviales