De todos modos a los geógrafos nos pones un mapa mudo delante y nos matas de nostalgia, como el músico que pone letras. Saludos de buenas noches, caballero.
Te lo habrán recordado muchas veces, pero es que ha sido leer la palabra geógrafo y acordarme de este fragmento de "El principito":
El sexto planeta era diez veces más grande. Estaba habitado por un anciano que escribía grandes libros. -¡Anda, un explorador! -exclamó cuando divisó al principito.
Este se sentó sobre la mesa y reposó un poco. ¡Había viajado ya tanto!
-¿De dónde vienes tú? -le preguntó el anciano. -¿Qué libro es ese tan grande? -preguntó a su vez el principito-. ¿Qué hace usted aquí? -Soy geógrafo -dijo el anciano. -¿Y qué es un geógrafo? -Es un sabio que sabe donde están los mares, los ríos, las ciudades, las montañas y los desiertos. -Eso es muy interesante -dijo el principito-. ¡Y es un verdadero oficio!
Dirigió una mirada a su alrededor sobre el planeta del geógrafo; nunca había visto un planeta tan majestuoso.
-Es muy hermoso su planeta. ¿Hay océanos aquí? -No puedo saberlo -dijo el geógrafo. -¡Ah! (El principito se sintió decepcionado). ¿Y montañas? -No puedo saberlo -repitió el geógrafo. -¿Y ciudades, ríos y desiertos? -Tampoco puedo saberlo. -¡Pero usted es geógrafo! -Exactamente -dijo el geógrafo-, pero no soy explorador, ni tengo exploradores que me informen. El geógrafo no puede estar de acá para allá contando las ciudades, los ríos, las montañas, los océanos y los desiertos; es demasiado importante para deambular por ahí. Se queda en su despacho y allí recibe a los exploradores. Les interroga y toma nota de sus informes. Si los informes de alguno de ellos le parecen interesantes, manda hacer una investigación sobre la moralidad del explorador..."
El dolor debe ser recuperado en su totalidad, sólo así se puede uno restablecer. Cuando todo vuelve a su ser, las rutas comienzan de nuevo a visualizarse.
Parece la geografía de una ruptura y al mismo tiempo el mapa de un rostro sin maquillar. ¿Es que la devastación del tiempo es nuestra verdadera piel?
ResponderEliminarTodo está por maquillar, querido Jesús. Los mapas, el tiempo, la vida...
EliminarSaludos desnaturalizados
¿ ni lindezas?
ResponderEliminar( Dalicia)
Siempre son bienvenidas, incluso aunque vengan de más allá de las lindes.
EliminarSaludos zalameros, Dalicia
Ya lo decía la canción:
ResponderEliminar"Y en tus ojos una luz se apaga,
ojos tristes al mirar los mapas,
ningún sitio a dónde ir
ninguno al que regresar..."
Todas las canciones, en algún que otro momento, parece que han sido escritas para todas las personas. Cuestión de universalidad y catarsis, supongo.
EliminarSaludos de bienvenida, Marisa
De todos modos a los geógrafos nos pones un mapa mudo delante y nos matas de nostalgia, como el músico que pone letras.
EliminarSaludos de buenas noches, caballero.
Te lo habrán recordado muchas veces, pero es que ha sido leer la palabra geógrafo y acordarme de este fragmento de "El principito":
EliminarEl sexto planeta era diez veces más grande. Estaba habitado por un anciano que escribía grandes libros.
-¡Anda, un explorador! -exclamó cuando divisó al principito.
Este se sentó sobre la mesa y reposó un poco. ¡Había viajado ya tanto!
-¿De dónde vienes tú? -le preguntó el anciano.
-¿Qué libro es ese tan grande? -preguntó a su vez el principito-. ¿Qué hace usted aquí?
-Soy geógrafo -dijo el anciano.
-¿Y qué es un geógrafo?
-Es un sabio que sabe donde están los mares, los ríos, las ciudades, las montañas y los desiertos.
-Eso es muy interesante -dijo el principito-. ¡Y es un verdadero oficio!
Dirigió una mirada a su alrededor sobre el planeta del geógrafo; nunca había visto un planeta tan majestuoso.
-Es muy hermoso su planeta. ¿Hay océanos aquí?
-No puedo saberlo -dijo el geógrafo.
-¡Ah! (El principito se sintió decepcionado). ¿Y montañas?
-No puedo saberlo -repitió el geógrafo.
-¿Y ciudades, ríos y desiertos?
-Tampoco puedo saberlo.
-¡Pero usted es geógrafo!
-Exactamente -dijo el geógrafo-, pero no soy explorador, ni tengo exploradores que me informen. El geógrafo no puede estar de acá para allá contando las ciudades, los ríos, las montañas, los océanos y los desiertos; es demasiado importante para deambular por ahí. Se queda en su despacho y allí recibe a los exploradores. Les interroga y toma nota de sus informes. Si los informes de alguno de ellos le parecen interesantes, manda hacer una investigación sobre la moralidad del explorador..."
Saludos de explorador
¡Qué bueno! No lo recordaba. Gracias, hoy me siento importante.
ResponderEliminarPues sí, duele. Pero así es la vida, a veces se pierde. Y casi siempre se gana algo, aunque sea un aprendizaje descascarillado.
ResponderEliminarBesitos
Lo que importa es que los límites los pongas tú, asi nunca habrá problemas fronterizos.
EliminarBesotes deslindados
Tras las capas de piel, el músculo herido. Me encanta el título.
ResponderEliminarTodos los dolores deberían tener un mapa en el que estuvieran marcados los atajos.
Un saludo .
El dolor debe ser recuperado en su totalidad, sólo así se puede uno restablecer. Cuando todo vuelve a su ser, las rutas comienzan de nuevo a visualizarse.
EliminarSaludos ennortados